Cuánto tiempo
hemos vivido al lado de un ser querido depositando en él o ella nuestra
felicidad? Cuánto y cuántas veces nos hemos apegado a las cosas materiales? Y
de repente, esas personas o cosas desaparecen o amenazan con hacerlo, provocándonos
un gran vacío interior, sufrimos, sentimos miedo, somos propensos a perder
nuestro sentido de vida, de la realidad y hasta nuestra personalidad.
El autor, (papa
Jaime) hace un análisis en pro de despertar nuestra conciencia, ofreciendo
sencillas herramientas para librarnos de nuestros apegos y poder experimentar
el mundo sin miedo, a través del verdadero amor.
Lo primero y
más importante de acuerdo al autor, es entender cuáles son nuestros apegos,
sean afectivos, materiales, o ideológicos. La decisión al final está en
nuestras manos. Solo nosotros tenemos la capacidad para permitirnos ser
felices, vivir en libertad, actuando cuanto antes y dejando el estado de
pasividad, inconformismo, tristeza o ansiedad que nos rodea.
Pero cómo
alcanzamos ese estado? A través de la Magia de la Espiritualidad, nos dice Papá
Jaime. Y no se refiere a profesar alguna religión, pero tampoco va en contra de
ello. Se trata de encontrarnos a nosotros mismos, a nuestro espíritu, ver hacia
nuestro interior y entendernos. “Solo existe el amor en el aquí y en el
ahora; la espiritualidad en la máxima expresión. Es el eterno presente“
Existe un hecho
que usualmente nos resistimos a aceptar: “el ego”, gran controlador de nuestra
vida, contaminado por el paso a través de la infancia y adolescencia, siempre
está buscando reconocimiento, aprobación, adulación, manipulación o control, y
nos obliga a hacer lo que no queremos, a pesar del razonamiento mental. “Creemos
estar despiertos, cuando en realidad estamos dormidos e inconscientes“
Y qué pasos nos
sugiere dar? Lo más importante es el autoconocimiento y la autoevaluación,
hacer un recorrido por nuestras vidas, identificando creencias, apegos, miedos,
formas de pensar y sentir. Debemos comprender qué es realmente el amor. Finalmente,
nos recomienda caminar hacia una conciencia superior, en donde se fusionan el
cuerpo, la mente y el espíritu. Cuidar el cuerpo a través de una alimentación
ordenada y el ejercicio diario. La mente, sanarla a través de la
auto-observación, conocernos a nosotros mismos. Y al espíritu lo fortalece la
meditación; aprender del silencio, disfrutar de la soledad, del plano más allá
de nuestro consciente, del amor por las personas.
Es un
interesante análisis que a todos nos viene bien, no importa si estamos casados,
divorciados, separados, en pareja, si vivimos con nuestros padres o con alguien
más. El ser humano es un ser individual, pero requiere también de vivir en
sociedad. Deseo que quienes tengan oportunidad de leerlo lo disfruten tanto
como un servidor, y les ayude a entender la realidad del verdadero amor
La mayoría de nosotros creemos que el
apego es algo natural con lo que nacemos, cuando en realidad lo crea nuestra
mente, se nutre del miedo y es el culpable, en gran parte, de nuestro dolor y
sufrimiento. Por eso, si nuestra felicidad depende de nuestros seres queridos o
de cosas materiales y éstos nos faltan o amenazan con hacerlo, sentimos un gran
vacío interior y nuestra vida pierde sentido.
Las dependencias emocionales nos brindan
herramientas sencillas para despertar la conciencia y liberarnos de nuestros
apegos, para que podamos vivir sin miedo a través del verdadero amor.